Conoce a Melanie Harding
Cargo: Jefa de Operaciones Nueva Zelanda
Equipo Operaciones
Segmento Riesgo Corporativo y Corretaje
Ubicación Auckland, Nueva Zelanda
Año de contratación 2006
Universidad/grado University of Limerick, Irlanda, Licenciatura en Estudios Europeos. Especialidad en Seguros y Francés (con honores).
Intereses personales
Dedico mucho tiempo a alentar a mis tres hijos, fanáticos del fútbol. También me apasiona el rugby, y he competido en medios maratones y otros eventos.
¿Puedes hablarnos de tu carrera en Willis Towers Watson?
Me incorporé como directora de cuentas, donde trabajé como defensora del cliente en las cuentas de corretaje más grandes que la empresa gestionaba en Nueva Zelanda. Trabajé junto con los equipos de corredores en Londres, Singapur y Australia para crear programas de seguros complejos personalizados para algunos de estos clientes. Dentro de este rol, también participé en el establecimiento de la práctica de soluciones de riesgo en Nueva Zelanda, junto con un rol de gerente nacional de servicio al cliente para crear estándares de servicio de mejores prácticas para clientes en toda Nueva Zelanda.
Después de dar a luz a gemelos en 2008, quize reevaluar el trabajo cinco días a la semana. Afortunadamente, la compañía estaba dispuesta a que yo trabajara a tiempo parcial, manteniendo mis cuentas clave y la sólida relación con los clientes que había desarrollado. Tomé una licencia en 2010, y luego regresé a Willis Towers Watson trabajando para proyectos específicos. En 2015, asumí mi cargo actual como jefa de operaciones, donde soy responsable de la ejecución de la estrategia de operaciones dentro del negocio neozelandés. Ahora tengo tres hijos varones y sigo trabajando a tiempo parcial, lo que me permite un equilibrio positivo entre la vida laboral y personal.
¿Puedes hablarnos de las responsabilidades diarias de tu trabajo?
Mi papel es liderar la estrategia de operaciones para Nueva Zelanda, que refleja los objetivos internacionales de entregar valor tanto al negocio como a nuestros clientes. Trabajo con el equipo de operaciones australiano y nuestro equipo de apoyo en Mumbai para lograr una prestación de servicios óptima para nuestros procesos. Mis días son diferentes, pero por lo general tengo reuniones de Skype con las principales partes interesadas, en diferentes lugares del mundo, así como reuniones semanales con mi equipo para comprobar la carga de trabajo y las prioridades, y resolver cualquier desafío que se presente, participando en la resolución de problemas y brindando asesoramiento cuando es necesario.
¿Cuáles son los principales desafíos de tu función? ¿Cómo los has superado?
Trabajar con equipos en diversos lugares del mundo requiere una forma diferente de comunicación. Sin embargo, Skype es una herramienta clave para superar este problema, en especial si hay más de un país que participa en las reuniones. El rol del área de Operaciones en Nueva Zelanda era un puesto nuevo en el momento de mi nombramiento y no había un marco al que pudiera hacer referencia. Sin embargo, esto me ha dado la oportunidad de recurrir a mi experiencia en el corretaje para abordar el cargo con «ojos nuevos» e identificar oportunidades dentro del negocio para mejorar la eficiencia y ayudar a definir la función.
¿Qué oportunidades de formación y desarrollo has recibido en tu puesto?
He trabajado con Willis Towers Watson durante 12 años, y pude observar el cambio y la evolución de la compañía con el tiempo. Participé en la defensa de los clientes, la gestión del cambio y la capacitación en liderazgo. También formé parte del Programa de Desarrollo Operativo, que fue una introducción de tres días a los principios fundamentales de la excelencia operativa. Como parte de este programa, tuve que presentar un portfolio al Institute of Leadership and Management, y logramos la acreditación. El entrenamiento posterior al curso fue invaluable, y utilizo las herramientas que aprendí en este curso todos los días de alguna forma.
¿Cuál es tu mayor logro desde que te uniste a Willis Towers Watson?
Estoy muy orgullosa del hecho de que mi carrera y las oportunidades aquí me han dado la flexibilidad de trabajar menos horas en un esfuerzo por equilibrar mi rol como madre con el trabajo que hago en Willis Towers Watson. En una industria más tradicionalmente centrada en el hombre, como la de los seguros, fui una de las primeras mujeres en diseñar un equilibrio entre el trabajo y la vida personal que funcionó tanto para mí como para la empresa. Ahora, en toda la empresa, hay una serie de acuerdos de trabajo no tradicionales que están en línea con la forma en que la gente trabaja hoy en día, con la flexibilidad y agilidad para hacer el trabajo. Ha sido una victoria para ambos lados.
¿Cómo describirías la cultura de Willis Towers Watson?
La cultura es uno de los puntos fuertes de Willis Towers Watson, ya que el término «un equipo» se aplica realmente dentro de la organización, en beneficio de nuestros clientes. Willis Towers Watson es realmente «glocal».
¿Qué es lo que más te gusta de trabajar en Willis Towers Watson?
Me encanta trabajar para una compañía que tiene alcance global y me permite aprovechar la experiencia y los recursos que vienen con este beneficio. Los colegas con los que trabajo, tanto en Nueva Zelanda como en el extranjero, hacen que mis experiencias diarias sean realmente agradables y me desafían de diferentes maneras. Además, como mi función es nacional, trabajo con todos en la empresa y las recompensas por poder ayudar a alguien más, aunque solo sea una solución rápida, hacen que mi trabajo valga la pena.
¿Hubo algo que te sorprendió acerca de tu papel o de la compañía?
Descubrí que el trabajo en equipo y el compromiso con el cliente eran la máxima prioridad, ya fuera que estuviera trabajando con Londres, Singapur, Australia o un equipo local. El cliente era el foco clave, independientemente de la ubicación o la unidad de negocios.
¿Cuál es tu expectativa de carrera en el futuro?
La capacidad de lograr la diferencia es realmente importante para mí, tanto desde la perspectiva de una mujer en la industria de seguros, una madre que trabaja y un miembro del equipo de liderazgo en Nueva Zelanda. Parte de mi papel es impulsar un cambio que haga que nuestra organización sea más eficiente y efectiva en lo que hacemos, lo que, a su vez, tendrá un impacto directo en el equilibrio entre la vida laboral y personal de mis colegas.